Mensaje de Pascua 2024 – Obispo Lawrence C. Provenzano

2024 Easter Message - Bishop Lawrence Provenzano
Posted by Teddy Byrne

Hermanos en Cristo,

A medida que avanzamos en estos próximos tres días santos, a menudo llamado el Triduo en la tradición de la Iglesia y llegamos a la celebración de la Pascua, me pregunté, ¿qué piensa realmente el mundo acerca de lo que hacemos? Nuestros rituales, nuestras oraciones, nuestras ceremonias y liturgias, los diversos tipos de lecturas, el uso de luz y oscuridad, incienso y agua y campanas, la Eucaristía, el pan y el vino, el Cuerpo y la Sangre de Cristo. Me pregunto, ¿qué piensa realmente el mundo al vernos a nosotros, la comunidad cristiana, reunidos para estas liturgias?

Me hace pensar que de hecho el mensaje de la Pascua, la nueva vida de Cristo para el mundo se transmite a través de todos estos signos y símbolos y acciones y palabras y gestos que la Iglesia utiliza desde hace más de dos siglos y atraviesa el verdadero dolor y sufrimiento y la desolación y muerte del mundo.

Siempre parece haber algún desajuste, la Iglesia está centrada en el Triduo y avanza hacia el día de Pascua. El mundo fuera de la Iglesia, la mayoría de la gente de Dios nos mira y se pregunta: ¿cómo podemos hacer esto en medio de la guerra y la falta de hogar, el hambre y los desastres en todo el mundo y en nuestras ciudades?

Mi reflexión y oración me han llevado a esto, que tenemos un mensaje de esperanza en Jesucristo que celebramos usando todos estos elementos, no en algún tipo de gesto supersticioso o algún tipo de juego de hacer creer, sino que de hecho se convierten en las herramientas con las que nos involucramos con todo el resto de la humanidad, diciéndoles tan alto como Podemos que Jesucristo resucitó de entre los muertos, que puso fin a la muerte y que lo que experimentamos en nuestra condición humana, lo que experimentamos en todo el mundo con todo el dolor, la guerra, el sufrimiento, la falta de hogar, la fragilidad que es parte de nuestra vida y sociedad, que hay realidad en el mensaje de Jesucristo, que es tangible, está encarnado, que podemos comprenderlo y compartirlo con nuestros hermanos y hermanas. Que nada de lo que hacemos son gestos vacíos de levantar una Biblia

y fingir que de alguna manera tenemos fe para responder preguntas, sino que de hecho, las liturgias de la Iglesia, los gestos, las oraciones, las palabras, las acciones,

los olores, los sonidos, animan a las personas a venir y experimentar en realidad la buena noticia de Jesucristo. Que de hecho, en el Día de Pascua, resucitó de entre los muertos y puso fin a la muerte. Y que como pueblo, podemos recibir aliento y apoyo, avanzar en nuestro viaje como pueblo Pascual comprendiendo el mensaje de Jesucristo para todo el mundo, no solo para los que adoran, sino para toda la humanidad, para todos en el mundo, para todo el pueblo de Dios.

Y así, mis hermanos en Cristo, al entrar en esta celebración de Pascua, os pido que compartáis esa buena noticia con vuestros hermanos y hermanas. Que de hecho seáis la herramienta, seáis el medio por el cual las personas entienden la nueva vida en Jesucristo debido a su encuentro con vosotros. Porque si habéis venido y habéis sido parte de nuestra adoración, si habéis rezado junto al pueblo de Dios, llevad esa realidad al mundo. Permitamos que las personas entiendan la buena noticia de Jesucristo. Eso se vuelve tangible en vuestro amor, en vuestros gestos, en vuestro cuidado.

Sí, aleluya, Cristo ha resucitado. Verdaderamente ha resucitado.

Aleluya.